12.23.2004

Así nomás

Era un pedacito de algodón que decidió mezclarse con las nubes para ir a conocer otros mundos. Estoy seguro que eso fue lo que pasó. Cuando dormía a mi lado podia escuchar sus sueños; este mundo era demasiado pequeño para ella, para esa ansiedad por vivir que rompía cada muro de la casa. Ayer decidió que era buen tiempo para volar, y lo hizo.

No pudo despedirse, pero sé que los buenos viajeros no lo hacen por miedo a quedarse. No lo tomo a mal. Antes no me gustaban los dias nublados. Ahora cada vez que vea una nube en el cielo sabré que en medio de esa inmensa blancura hay una infinita sonrisa a mi salud.

1 Comments:

Anonymous Anónimo said...

lee Nuvolando (en español, Nuvolina), de Geminiani Riccardo, Ceccoli Nicoletta 1998

es un cuento para niños sobre una nube...
precioso.

Un abrazo,

enero 20, 2005 9:52 a.m.  

Publicar un comentario

<< Home